Despertar desde las emociones
¡Despertar!…, de manera general, se asume como salir
del sueño.
! Se puede ir más allá!
Se puede decir que:
• Despertar, es la emoción de obtener
un nuevo conocimiento.
• Despertar, es cuando se asume una realidad
o realidades.
• Despertar, es aceptar que se tienen
debilidades, temores, errores.
¿Cuántas otras respuestas se pueden dar?
¿Cuántas otras opiniones se pueden dar?
!Veamos!
Pasamos muchos tiempo despiertos, pero pareciera que vivimos en un adormecimiento.
Empecemos por entender que estar despierto es
asumir que se está consciente.
¿Cuántas veces hemos dejado dormida la conciencia de nuestro ser? ¿Por qué mantenemos ese adormecimiento?
Quizás, porque aunque estemos despiertos vivimos en un letargo para no querer sentir ese despertar.
! Despertar es saber y sentir que estamos vivos!
Despertar es preparamos para un nuevo día que puede
venir con un sin fin de
expectativas, para realizar una nueva tarea, para aceptar un nuevo reto,
para experimentar situaciones complejas.
Despertar es sentir satisfacción, es valorar, es agradecer, es amar, es sufrir, es llorar, es tener miedo…, es mucho más, es vivir.
Al despertar comenzamos a sentir que afloran las emociones, ellas también se despiertan.
Las emociones brotan porque les gusta estar despiertas. Entonces por qué en muchos momentos de la vida las obligamos a estar dormidas o escondidas. Ellas hacen que nuestra vida se nivele, que se vea el arcoíris o el claroscuro de cada momento que vivimos. Ninguna emoción está para ser cuestionada, para verla como negativa o vergonzosa.
Despertar a la vida es saber que nos preparamos para hacer caminos, para aceptar que lo fácil ya está hecho, y que lo difícil exige afrontar, atreverse, preparación, aceptación, riesgos y experimentar situaciones difíciles, por eso es que debemos trabajar con la emoción que corresponda en el momento, dejarla salir y que haga su trabajo.
Despierta tus emociones y estarás siempre despierto, estarás sintiendo la vida en todas sus dimensiones. Cada una de ellas tiene presencia propia, con tonalidades para cada sentimiento, para cada sensación tan humana en cada uno de nosotros, que ninguna de ellas se queden adormecidas
Despierta tu vida, que tus cómplices sean tus emociones, y la conciencia la realidad de cada día.
Despierta y trabaja tus emociones para que:
Ames con todo tú ser
Sonrías con placer
Llores con sentimiento
Sufras con dignidad
Te molestes con respeto
Sueñes con ilusión
Pienses con rectitud
Afrontes tus miedos y los venzas
Vivas con alas propias y,
Vueles con libertad
IA
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